No, a la concentración monopólica en el puerto de Valparaíso

Con los últimos acontecimientos internacionales se ha inaugurado el principio del fin de una política económica que, en el caso de Chile, fue impuesta a sangre y fuego: las ventas a precio vil de todas las empresas del Estado para hacer ricos a los civiles que cooperaron con el golpe de Estado y luego las privatizaciones a cargo de la Concertaci