Las cosas se han puesto bravas, el Grupo Urenda envió un mensaje por los diarios regionales y nacionales a los consejales y políticos que insisten en construir un mall en el sector Barón de Valparaíso. El proyecto publicitado para construir un puerto en Laguna Verde es un claro mensaje a tan resistida iniciativa de Mall Plaza y, además, es una respuesta al gobierno por detener las licitaciones de los puertos y no ser claros en que esos procesos están suspendidos hasta la próxima administración. Lo anterior se ratifica con dos señales no menores de parte del actual gobierno: que ordenara a las empresas portuarias de Valparaíso y San Antonio retirar las consultas del Tribunal de la Libre Competencia que posibilitaban que los grupos monopólicos se siguieran adueñando del 13% de los terminales multioperados que queda en Chile; y que Hacienda no autorizara los dineros para indemnizar a los dueños de embarcaciones del muelle Sudamericana.



A estos dos hechos se debiera sumar la postura del actual alcalde porteño, Aldo Cornejo, defensor acérrimo del proyecto Mall Plaza que ha tenido un vuelco, a lo menos, interesante al declarar que: "Creo que votar un proyecto de tanta envergadura como el Mall Plaza, enturbia las elecciones municipales".

Entre sumas y restas de declaraciones que van y vienen, las licitaciones portuarias de Chile están detenidas, así como también el Mall Plaza, no sólo porque es un error político seguir insistiendo en el tema y también porque el Ministerio de Hacienda sabe que el costo social de una nueva intentona privatizadora es inmensa en nuestro país, ya que frente a ella no sólo se encontrará con la negativa de los trabajadores y la ciudadania, sino que además con analisis políticos que creen que la concentración monopólica y la falta de regulación de la competencia, como la relación capital-trabajo, es un tema prioritario antes de cualquier idea de privatización.


Jorge Bustos