Por fin el mercurio dijo y tituló en la portada de hoy primero de Septiembre de 2020 “EL PUERTO EN LLAMAS”, claro que la verdad es que el incendio lleva más de 15 años y al parecer ahora sí que quema la incapacidad e ineficiencia de la estatal empresa portuaria de Valparaíso (EPV) y sus directivos, como de mayor manera sus gerencias.

La estatal EPV en todos los gobiernos desde su fundación ha privilegiado a los clanes navieros por sobre los intereses de la ciudad y sus habitantes, pero no sólo eso, también merece mencionar que todos los planes desarrollados por clanes navieros y comerciales con sus socios en los gobiernos, ministerios y EPV son ilegales, en todos se han torcido la leyes y varias veces las han violado.

Hoy no existe proyecto de esta empresa que esté en pie y no tenga un conflicto legal, sólo para refrescar la memoria:

1.- Mall Barón.

La Corte Suprema declara ilegal el permiso y Falabella demanda indemnización

2.- Terminal Pacifico Sur.

Demanda Arbitraje por la prioridad de acceso por la carretera Acceso Sur

1. juicio en tribunal de la libre competencia (TDLC) por aforos perdidos durante 4 años y dárselos a Zeal.

3.- ZEAL.-

Construido en los terrenos donados  por Santa María a la ciudad, ahora está en Arbitraje por violación de contrato.

4.- TCVAL.

Término de contrato, porque se dieron cuenta que les habían vendido un mal proyecto e inviable.

Y ahora Valparaíso Terminal de Pasajeros (VTP) termina el contrato y demanda por indemnización, cuestión que demuestra lo patrañero del cartel Urenda. Sabían que el proyecto para cambiarse de la Bodega Simón Bolívar, era trucho, era ilegal e igual confabularon por si pasaba.

Así las cosas uno se pregunta ¿en una empresa privada tendrían un gerente o varios de ellos después de semejantes errores? El gerente de todos estos proyectos, el cerebro de semejante desorden es el mismo que en este gobierno fue nombrado gerente general de la EPV, y nadie dijo nada, ni los camioneros ni los gremios aduaneros, menos los trabajadores portuarios, que lo único que hacían era pedir indemnización, mientras los piratas se adueñaban de la ciudad.

¿Alguien después de esto puede confiar en el DIALOGO al que llaman la estatal y el intendente? ¿Qué garantía dan estos directivos, gerentes e intendente? Lo que ofrecen es sólo más de lo mismo, otro bochorno otros 20 años de mentiras.

Yo invitaría a los gremios y a los sindicatos a paralizar el puerto hasta que cambien a todos los que nos han tenido 20 años sin ningún proyecto serio para la ciudad, que no sólo han detenido su crecimiento, sino que la han perfilado como una de las más corruptas de Chile.

Jorge Bustos