Los medios nacionales insisten en la mejoría de los números, instalando la idea de que el problema de Chile es solo el sanitario, dejando de lado el tema económico es decir la recesión mundial y el peor “el de la clase política” que no ha dado el ancho y que sigue permitiendo el abuso de las instituciones del estado donde trabajan sus militantes, por ejemplo el SII, o el tráfico de armas por parte de ex uniformados y también de activos.

Frente a los resultados y a las medidas para salir de estas crisis, la desconfianza se ha apoderado de la ciudadanía pues ve que no llega o que simplemente no chorrea, si hasta una derechista que es alcaldesa, cuestiono a grito pelado al intendente de la región metropolitana tratándole de mentiroso, por las 20 mil cajas que no llegan.

El ´problema es tan serio para los que administran el país, que el mismísimo mercurio reconoce que 2, 3 millones de trabajadores, que representa el mismo número de familias, van a inundar las calles buscando trabajo una vez que se levanten las cuarentenas. Sin embargo debemos decir que también existe un 28% de la masa laboral sin contrato o por cuenta propia, que también saldrá a la calle a buscar dinero para su sustento, gran desafío para estas autoridades, que cuando proponen una solución, esta se acompaña de cómo pueden sacar algún beneficio económico, o favorecer a algún AFP (amigo, familiar o pariente).

La clase política que no da el ancho, más bien la mayoría de ellos, impúdicos sigue usando la desgracia de más de 6 millones de chilenos, como arma electoral y usan la caridad como arma para limpiar su imagen y desastroso actuar, su guardianes, la represión y quienes los administran ya no solo les basta con golpear, sino que también hostigan a las comedores populares y ollas comunes negándoles permisos a los voluntario y exigiendo actos administrativo para funcionar.

En un rato más el ladrón de banco, aparecerá a contar otra mentira, ahora dirigida a la “clase media”, pero eso lo comentaremos mañana.

Así este domingo y la semana solo tiene una buena noticia, que ha sido la lluvia, que si bien ha limpiado calles y veredas, ha dejado al descubierto la inoperancia de algunas municipalidades, obras carísimas del MOP que no sirven y llenan de desechos, agua y mierda las poblaciones más pobre, que es otra forma de corrupción.